Madrugamos para emprender ruta a la finca La Zarzuela, sita en
Calzadilla, Cáceres y en cuya extensión pastan las reses marcadas bajo
el hierro de San Martín y la legendaria H de Hernández Pla.
Allí nos recibió su actual propietario, Alberto Manuel Hornos, matador
de toros, que con sacrificio y esfuerzo trata de recuperar los cárdenos
que adquirió a Ignacio Huelva. Primeramente pasamos a contemplar
animales cuyo destino serán las calles, pasando después conforme
avanzaba nuestro recorrido a cercados donde las hechuras y seriedad de
los ejemplares aumentaba y los santacolomas compartían los pastos, un
tanto secos por la escasez de agua de este invierno, con cornúpetas de
procedencia Marqués de Domecq. Los más serios conformaban una torada de
unos 15 ejemplares que presentaban capas cárdenas en toda su extensión y
con accidentales blancos y claros por toda su fisionomía, propios de la
aportación Buendía a la vacada.
De entre ellos un buen lote para una plaza seria de segunda o incluso
una de primera, encontrándose entre ellos dos toros con trapío mas que
suficiente para la Plaza de Las Ventas, a la que posiblemente puedan
llegar como sobreros.
Tras recorrer los cercados de los machos nos desplazamos varios km hasta
la finca en la que se encuentran las madres de la ganadería, que
pudimos observar junto a sus becerros, que cambiaban ya el pelo castaño
de nacimiento por el cárdeno definitivo, en un espéctaculo de pintas
nevadas, luceros, jirones, meanos, berrendos, incluso algún cinchado.
Tras disfrutar de la mañana campera, comimos y emprendimos regreso.
Nuestro agradecimiento al ganadero por el buen trato recibido, al que
deseamos suerte en el duro camino que ha emprendido en rescate de estas
bonitas reses.
TOROS PARA LAS CALLES
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